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Descripción de la especie
La okra o kimbombo
Nombre científico: Abelmoschus esculentus
Familia botánica: Malvaceae
Esta planta tiene un origen africano y tanto sus frutos como sus brotes tiernos se pueden comer como verdura, en ensaladas, en guisos y en picadillos, los que se espesan gracias al mucílago que éstos le dan y se enriquecen con el aporte de fibra, hierro, fósforo, ácido fólico, calcio, magnesio, flavonoides, betacarotenos, vitamina A, B1, B2, B3, B6, B12, C, E y K. Las semillas secas y molidas se emplean como un sustituto del café y de ellas se obtiene un aceite rico en omega 9 pero al contener ácido palmítico es menos saludable porque aumenta el colesterol. Las hojas se pueden secar y moler para usarse como condimento en distintos platillos. En Grecia preparan un plato típico a base de estos frutos y salsa de tomate.
Medicinalmente la okra posee propiedades antioxidantes, laxantes, antianémicas, emolientes y diuréticas, siendo usada para protección de la mucosa digestiva (gastroprotecor) y para lavados oculares, contra la tos y las afecciones de garganta, mejorar la digestión y el estreñimiento, reducir el estrés, fortalecer los huesos, la piel y el cabello.
Ornamentalmente la okra es muy llamativa por sus grandes flores amarillas y es ideal para jardines, aceras y mantenerla en grandes macetas, en donde atraerá abejas, colibríes y mariposas. Se reproduce fácilmente por medio de semillas, las cuales se pueden dejar en agua en la noche para que germinen más rápido y no se deben consumir las semillas crudas porque son tóxicas.