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Descripción de la especie
Azaleas y rododendros
Nombre científico: Rhododendron sp. y Azalea sp.
Familia: Ericaceae
Las azaleas o rododendron son originarias de Asia, Norteamérica y el norte de Europa, pero las más comunes son nativas de China y Japón, siendo Rhododendron simsii la más frecuente en jardinería. Y aquí cabe señalar que frecuentemente hay una confusión entre ambos géneros, ya que la Azalea y el Rhododendron son básicamente iguales, y es preciso irse a las flores para encontrar la diferencia, ya sea en el número de estambres y la posición de las flores en las ramitas. En Azalea las flores son solitarias, nacen en la punta de las ramitas y poseen pocos estambres, alrededor de 5, mientras que en Rhododendron las flores nacen en ramitos axilares y poseen más cantidad de estambres.
Son especies que les gusta crecer en lugares a media sombra, cerca de ríos y quebradas, con suelos buenos, ricos en materia orgánica y buen drenaje, pero un poco ácidos, en donde encuentren un pH entre 4.5 y 6.
No les gusta el sol directo, calor ni la falta de agua, prefieren climas fríos con alta humedad ambiental, por lo que son ideales para zonas medias y altas. Se deben proteger de los vientos, pero requieren buena ventilación.
Actualmente, su cultivo ha sido muy intenso, lo que ha generado gran cantidad de híbridos y variedades, alcanzando un aproximado de más 10.000 diferentes.
Las azaleas y rododendros son especies que pueden variar entre arbustos y plantas rastreras, de lento crecimiento y raíces superficiales, que pueden llegar a crecer desde 50 o 60 cm hasta más de 10 m, en el caso de los rododendros. Muy ramificados desde abajo, con troncos delgados, torcidos y raíces superficiales.
Las hojas son simples, alternas, y se concentran al final de las ramitas, en donde las hojitas nuevas llaman la atención por su color verde tierno que contrasta con el tono verde oscuro brillante del resto del follaje. Son duras (coriáceas), de forma ovalada a lanceolada, con el borde entero, ligeramente pubescentes. El peciolo es muy corto y las ramitas y tallos jóvenes también son pubescentes. Algunas especies pueden mantener las hojas todo el año, o botarlas durante algún tiempo.
Las flores son muy llamativas por su tamaño y colorido, ellas pueden ser solitarias o nacer en pequeños grupos. Son acampanadas y poseen 5 sépalos y 5 pétalos anchos, que pueden ser de muchos colores, dependiendo de la especie, variedad o híbrido. Pueden ser blancos, amarillos, lilas, rojos, rosados, púrpuras, matizados, etc., pero mantienen pequeñas manchas en uno o varios de sus pétalos cerca de la base. También hay flores dobles, con una mayor cantidad de pétalos, que las hacen asemejarse a las camelias o las rosas.
Los frutos son cápsulas ovaladas de unos 2.5 cm de largo, ligeramente estriados y con restos del gineceo en el extremo. Cuando maduran se tornan secos y de color café oscuro, abriéndose en 5 partes (valvas) por las estrías, para liberar sus muchas semillas de forma ovoide y alargadas, de entre 1 y 1,5 cm de largo.
A pesar de que las azaleas y rododendros se reproducen mayoritariamente por medios asexuales, algunas personas emplean las semillas para generar nuevas variedades y patrones para injertos. Asexualmente, se utilizan los acodos y los esquejes para reproducirlas, y garantizarse la permanencia de las características de floración. En el caso de los esquejes se recomienda cortarlos de unos 10 cm con unas 2 a 4 hojitas, aunque hay algunas personas prefieren arrancarlos con cuidado en lugar de cortarlos.
Entre los cuidados que se les deben dar, está el mantener el sustrato ácido, ya sea con la incorporación de enmiendas como corteza de pino picada y aplicaciones de quelatos de hierro, ya que pueden presentar amarillamiento en las hojas por deficiencia de hierro (clorosis férrica). En cuanto a podas, algunas especies no la necesitan porque son de bajo tamaño, pero en las más grandes se recomienda podarlas de vez en cuanto para mantener un tamaño adecuado y estimular la floración, a excepción de que se desee que crezca mucho para tapar muros o vistas no deseadas.
Las azaleas y rododendros se utilizan en jardines, parques, jardines japoneses, cerca de lagunas y fuentes, maceteras, aceras, rocallas, en grupos como elementos centrales de jardines, en macetas tanto en exteriores como en interiores, en borde de senderos, bonsáis y debajo de árboles. Algunas especies tienen propiedades medicinales y otras componentes que sirven para estabilizar las tintas a color de las prensas gráficas.
Además de ser altamente ornamentales, las azaleas y los rododendros poseen mucho simbolismo, especialmente en la cultura japonesa, en donde son símbolos de la buena fortuna, por lo que se acostumbra regalarla con los mejores deseos de éxito y prosperidad. También representa la feminidad y la fertilidad, siendo motivo para ofrecerlas a las embarazadas para la buena fortuna y que todo salga bien en el parto. Se dice que su presencia ayuda a mejorar la memoria y la concentración.
En el lenguaje de las flores “azalea” significa una felicidad misteriosa, pero si las flores son amarillas representa la falsedad y el engaño, y las rojas la venganza. Siendo motivo para regalarlas con esos mensajes.
A pesar de su belleza, se debe tener cuidado con estas especies, porque son especies tóxicas, porque contienen unas sustancias llamadas grayanotoxinas, que son cardiotónicas y neurotóxicas. Estas sustancias están presentes en la miel de abeja que fue elaborada con el néctar de estas especies. Inclusive el historiador griego Jenofonte en el S V y S IV antes de Cristo, relataba como un grupo de soldados se enfermaron al consumir la miel de unos panales cerca del mar Negro y fue Plinio el viejo en su Historia Natural 21 que se refirió a esta miel como la miel loca y la relacionó con los rododendros. Actualmente, a la Comisión de la Unión Europea se presentó una solicitud para utilizar esta miel como raticida.
La belleza de estas especies, es tal que en diferentes partes del mundo, se les honra con jardines y celebraciones. Por ejemplo en Carolina del Sur hay un parque llamado Jardines y Plantación Magnolia, el cual es uno de los jardines más antiguos de Estados Unidos, y en donde se plantaron las primeras azaleas de América; por lo que la colección es bastante grande, y aunque se fundó mucho antes, se abrió al público desde 1871 después de la Guerra Civil, como una forma de captar recursos para su mantenimiento. Durante los meses de marzo y abril se puede apreciar la espectacular floración de las azaleas y los rododendros, lo que posiblemente contribuyó a superar los efectos emocionales de la Guerra Civil en la población.
En Carolina del Norte se encuentra el mayor jardín de rododendros silvestres del mundo, en el Parque Natural Roan Mountain en Baskerville y el jardín Botánico de Kew mantiene una gran colección de rododendros.
En la región de Hwangmaesan, Hapcheon en Korea del Sur, se celebra desde 1997 durante el mes de mayo el Festival de la Azalea Real, que pretende valorizar los extensos campos de azaleas y desde el año 2012 esta región ha sido incluida dentro de los 50 mejores lugares a visitar en Korea.
Japón es otro de los países que celebra en grande a las azaleas, durante abril y mayo, en el Festival de la Azalia en el santuario Nezu.
Los rododendros son tan importantes que en Nepal se le ha designado como la Flor Nacional, e igualmente representa a varias ciudades del mundo, como São Paulo en Brasil, Washington y Virginia Occidental en Estados Unidos y a Sikkim en la India.
Hasta canciones se les han dedicado a estas especies, como la famosa Flor de azalea cantada por Jorge Negrete, escrita y compuesta por Manuel Esperón González y Zacarías Gómez Urquiza
Otros nombres comunes que se le dan a las azaleas y rodondedos son: azáleas, azalea de montaña, bujo, laurel rosa, pentecostera, rosa de los Alpes y rosebay.
El género Rhododendron tiene su origen en los términos griegos “rodon” rosa y “dendron” árbol, significando árbol de las rosas. Y Azalea proviene del griego “azaleos” seco o árido, en alusión al lugar en donde naturalmente se desarrolla.
