Corteza amarilla

El corteza amarilla o cortez amarillo

Nombre científico: Handroanthus ochraceus (Tabebuia ochracea)

Familia botánica: Bignoniaceae

La corteza amarilla es un árbol nativo el cual no exageramos al decir que es probablemente uno de los 10 árboles de floración ornamental más hermosos y llamativos del mundo entero. Basta decir que durante la estación seca y caliente que se presenta durante los primeros meses del año en la vertiente Pacífica, desde el nivel del mar hasta los 1200 m de elevación, es común observar a grupos de turistas o familias enteras tomándose fotografías o vídeos junto a alguno de los muchos árboles en plena floración que aparecen a la orilla de los caminos y carreteras, ya que sinceramente el espectáculo es celestial.

Aunque no produce frutos comestibles que atraen y alimentan a la fauna silvestre, las flores de este árbol sí son muy apetecidas por animales grandes que las devoran con avidez, como los monos congos (Alouatta) y los garrobos (Ctenosaura), así como aves insectívoras que llegan por la gran cantidad de insectos que las visitan.

Una característica muy importante a tener presente a la hora de identificar esta especie y diferenciarla del cortez negro, del roble sabana y en especial del primavera (Roseodendron donnell-smithii) que también tiene flores amarillas y es con el que más se le confunde cuando está floreado, es la fina y muy evidente pubescencia amarillenta que posee en tallitos y hojas jóvenes, peciolos, yemas florales y foliares, cáliz de las flores y frutos.

La corteza es una especie que causa preocupación en quienes la plantan a causa de un feo marchitamiento o quemadura negra que afecta y debilita su follaje durante los últimos meses del año, pero este fenómeno es una condición natural que presenta, la cual no debe ser considerado como un problema que ocasionará que el árbol muera, ya que el mismo se da únicamente en las hojas en el momento de caer y al brotar de nuevo, se podrá notar como las hojitas nacen sin ningún problema. Este fenómeno también se puede observar en sus primos, el roble sabana (Tabebuia rosea) y en el cortez negro (Handroanthus impetiginosus).

Contrario a lo que muchos piensan el corteza amarilla empieza a florecer a muy corta edad, inclusive se puede dar el caso de que durante el primer año de plantado, aparezcan una o dos pequeñas flores, las que se irán incrementando conforme pasan los años, y ya a lso 5 años podrá lucir una espectacular floración. Obviamente, también depende del lugar en donde se plante, ya que en algunos sitios tardará un poco más.

A pesar de que en Costa Rica la dura, fuerte y atractiva madera de esta especie posee una gran demanda para la fabricación de carrocerías, por suerte la población silvestre de esta especie es más o menos abundante y desde hace varios años se han plantado miles de árboles en parques y jardines por todo el país.